La verdad es que, cuando a los niños les duele o pica la garganta, es probable que haya un virus. Este desaparecerá, pero hay pasos que puedes seguir para que tus hijos vuelvan a estar a pleno rápidamente:
- Ofréceles mucho líquido para beber. También es un buen momento para darles una paleta.
- Enséñales a hacer gárgaras. Hacerlo con agua tibia con sal cada algunas horas puede ayudarlos a aliviar el dolor.
- A la noche, enciende un humidificador de aire frío. El objetivo es mantener húmedo el aire de la habitación. Asegúrate de limpiar el humidificador con frecuencia.
- Contrólales la garganta y llama al pediatra si:
- El dolor se prolonga durante varios días
- También tienen fiebre o dolor de oídos o les resulta difícil respirar o tragar. Podrían tener una infección (como una infección estreptocócica) que necesita tratamiento.
Debido a que los gérmenes que causan el dolor de garganta se transmiten fácilmente, recuerda que debes hacer que todos los miembros de la familia se laven las manos con frecuencia y que eviten compartir los vasos, cubiertos y toallas.